El arco iris es un fenómeno
óptico debido a la dispersión de la luz blanca por la refracción en las gotas
de agua. Fue explicado por Descartes en el año 1637.
Para observar el arco iris nos
tenemos que colocar de espaldas al Sol y mirar las gotas de agua con un ángulo
de 42º respecto a la línea que las une con el Sol.
El hecho de ver un arco es debido
a que el horizonte corta la imagen, desde un avión, por ejemplo, podríamos ver
una circunferencia.
En ocasiones, si hay una segunda
reflexión en el interior de la gota, podemos ver por encima del primer arco
iris un arco iris secundario más tenue que el primero y con los colores
invertidos.
Existe mucha polémica sobre cuántos
son los colores del arco iris. Se cree que tiene 7 según los estudios de Isaac
Newton en 1704 y estos colores son: rojo, naranja, amarillo, verde, azul, añil
y violeta. Pero en realidad el arco iris cuenta con 3 colores que son los
primarios y al aparecer el fenómeno del arco iris, se puede visualizar otros
colores por las mezcla de los primarios. También se estudió que el color añil
no existía en el arco iris pues no era más que una tonalidad distinta del
violeta.
En conclusión el arco iris se produce cuando llueve y
aparece un rayo de Sol que atraviesa las gotas de lluvia. Estas descomponen la
luz blanca en los siete colores básicos que la forman. Normalmente se pueden
ver un arco iris primario y uno secundario, mucho más difuso que el primero.
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